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No necesitamos analizar más este episodio para
aplicar un parecido tono simbólico al segundo episodio: el apocalipsis de San Juan
contiene en sus capítulos la recurrida imagen de la Babilonia corrupta, que con el tiempo
y el acontecer histórico se ha asimilado a Roma como ciudad y símbolo de poder maligno:
la Roma imperial y anticristiana primero, y la Roma como sede de los papas enfrentada a
movimientos reformistas o secesionistas del cristianismo, después. Cátaros,
protestantes, hugonotes, incluso ahora los testigos de Jehová, entre otros
muchos acudieron a la imagen de la Babilonia corrupta para denunciar los desvíos morales
de la iglesia de Roma, y por tanto, todos acudieron al apocalipsis de San Juan.
Este contiene otras imágenes, además de la que he escogido, que no tienen por que
coincidir con esta linea argumental que empiezo a trazar. Sin embargo, la conclusión que
presento mantiene el tono simbólico y el significado crítico del tercer episodio. Pero
es que, además, conecta con un elemento sorprendente del primero: ¿porqué sale a
relucir Roma en la broma del capitán Haddock? ¿Porqué la basílica de San Pedro de
dicha ciudad y no, por ejemplo, el ayuntamiento de Bruselas o los canales de
Brujas? Dudo que esté creando sólo una posible interpretación de este grupo de
alusiones al catolicismo; creo que estoy descubriendo la intención de Hergé (aunque
seguramente no completamente) al incluírlas en el desarrollo de la aventura. La espada y
la cruz complementan de forma convincente la interpretación del papel de San Juan
Evangelista en la trama oculta, y ahora sí puede empezar a verse la sorna con que el
capitán se quita la gorra en el primer episodio como algo más que una burla a los
inspectores, tanto como una falta de respeto al Vaticano. |
La primera de todas ellas aparece en la pág. 10, A 1: al fondo de la imagen surge la proa de la maqueta de una carabela. La carabela se conoce universalmente por ser instrumento del descubrimiento de América y de la posterior labor de cristianización del continente. Dado el gusto de Hergé por la simbología, interpreto este elemento similarmente al papel que juegan la cruz y la espada: dicha cristianización se produjo a sangre y fuego. |
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A su vez, esta imagen induce a confirmar la relación entre Roma y el apocalipsis, entre el primer y segundo episodios del principio del capítulo, ya que inmediatamente al águila y al cardenal ( pág. 60 A3) aparece la estatua de San Juan Evangelista ( pág. 60 B1). Y ello no es casualidad, podéis estar seguros. Si todo esto no puede integrarse en el conjunto de críticas, que baje Dios y lo vea. |
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"... Defoe se propuso escribir una obra de tipo alegórico-moral: el protagonista, empujado por el afán de la aventura y del lucro, y desoyendo los prudentes consejos de su padre, se lanza a recorrer mundo; en una tempestad naufraga, y mueren todos sus compañeros, aunque él logra salvarse acogiéndose a una isla desierta, en la desembocadura del Orinoco. Allí, a lo largo de ventiocho años, vive solo y logra construirse una vivienda, cultivar la tierra, criar ganado y rodearse de numerosas comodidades. Al mismo tiempo recupera la fe que había perdido, circunstancia que constituye las clave intencional de la novela, con su evidente símbolo del alma pecadora que vuelve a encontrar a Dios en la Aflicción." |
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Me refiero a la más
famosa obra de Defoe, que fue un destacado activista anticatólico, entre otras cosas, de
la Inglaterra del siglo XVII-XVIII. "Vida y extraordinarias y portentosas
aventuras de Robinson Crusoe", de 1719. Dicho comentario parece hecho a
propósito para orientarnos en la búsqueda de un sentido a toda la trama oculta: ésta
tiene un carácter moral y de denuncia, (no alegórico, a pesar de la alegoría
zodiacal del capítulo anterior, pero sí moral) y la clave intencional de la doble
lectura es la crítica del alma pecadora de la Iglesia que conoce Hergé perfectamente.
Incluso el carácter astrológico- zodiacal de la trama (que veremos en detalle en
capítulos posteriores) entra de lleno en esta consideración, ya que incluirla supone un
desafío a la doctrina de una institución que rechaza la astrología por su carácter
pagano. Pero, ¿ porqué esta crítica , su forma criptológica y su existencia secreta y
no hecha pública? |
(Continuará. El próximo capítulo será publicado, si Dios quiere, el 24 de septiembre del año 2000, primer día de Libra, en esta misma web)
1Apocalipsis.--- El de San Juan
Evangelista forma parte de un conjunto de obras que llevan ese nombre, que en griego
significa "revelación" (nada más terrible) , término que sintoniza con el
carácter de esta obra. Escritas todas alrededor del año de aparición del cristianismo,
antes y después, forman parte de la tradición hebrea y judeocristiana y se caracterizan
por usar un lenguaje oscuro y simbólico, a propósito de revelaciones divinas y
profecías de acontecimientos futuros que afectan a la humanidad. Y a pesar de las
connotaciones catástróficas que el término ha adquirido con el tiempo, los apocalipsis
presentan una visión final optimista de las tribulaciones de los hombres, aunque eso sí,
bajo la obediencia a Dios. Cinco cruces diferentes. A éstas hay que añadir la primera mención de la cruz del águila, que aparece en "El secreto del Unicornio", en los pergaminos que en la página 61, A1 y C1 de dicha aventura aparecen todos juntos anunciando el carácter criptográfico de la siguiente, nuestra aventura. En total, seis cruces diferentes, todas símbolos cristianos. No hay ninguna otra aventura de Tintín donde pase algo parecido.
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