El valle de Bardají aparece citado por primera vez el 13 de noviembre del año 959, cuando se habla de la comarca de Bardají, en la Ribagorza. No se sabe en qué momento concreto todo el valle pasó a estar bajo la jurisdicción de la catedral de Roda, si bien es probable que fuera desde la creación de ésta. Lo que si sabemos es que en 1295 se realizó una permuta de terrenos entre la sede de Roda y el monasterio de San Victorián y desde ese momento el valle pasó a depender del cenobio.

El templo tiene una única nave, rematada al este por un ábside semicircular de tradición lombarda. Posteriormente se añadieron a la nave dos capillas laterales, configurando una planta de cruz latina.

El tambor absidal está decorado con arcos ciegos y lesenas. En la parte central se abre una ventana de medio punto y doble derrame.

La puerta de acceso se encuentra en el muro sur, de factura moderna. El original se encontraba unos metros más al oeste, pero ahora se encuentra oculta por unos nichos.

También en el muro sur encontramos una espadaña de dos ojos.

En el interior del templo se conserva una interesante pila bautismal.