Iglesia de estilo gótico, construida a finales del siglo XIII. Tiene una portalada formada por un imponente atrio cubierto con bóveda estrellada. La portalada está formada por tres arquivoltas apuntadas.

El tímpano está dividido en dos partes y representa la escena del Juicio Final, como sucede también en la iglesia de Santa Maria la Real. En la parte superior podemos ver la imagen de una majestad flaqueada por dos ángeles y dos imágenes que están orando. En la parte inferior podemos ver a las almas pidiendo clemencia y esperando ser juzgadas.

Por encima del tímpano podemos ver los restos de un rosetón cegado. Estos son los dos únicos elementos decorativos que podemos encontrar por la parte exterior del templo. El resto es bastante sobrio.

En el interior del templo, de una sola nave y con cabecera poligonal, podemos encontrar las sillas de un coro del siglo XVI, de estilo plateresco, que originariamente se encontraba en el monasterio de San Salvador de Leyre.