Provincia de Barcelona
Sant Sebastià del Castell de Sallent
(Sallent, El Bages)
41º 44,282'N ; 1º 58,770'E
La primera noticia del lugar de Sallent data del año 955. En 1022 la
condesa Ermessenda empeñó el castillo a la familia Gurb-Queralt. Estos
lo vendieron en 1208 al rey Pere I. Unos años más tarde, en 1246 , Jaume I
permutó la fortificación con el obispado de Vic a cambio de unas tierras en
Valencia.
El templo, situado dentro el recinto fortificado, estaba inicialmente dedicado
a San Esteban, pero en el siglo XVI se cambió su advocación. Cuando se
consagró la canónica de Santa Maria del Estany, a principios del siglo XI,
fue cedida a este monasterio. En 1260 pasó a depender del obispado de Vic
gracias a una permuta.
En 1936 fue profanada e incendiada, perdiendo su cubierta. No se restauró
hasta el año 1985 en que se consolidaron sus muros, pero no se rehizo la
cubierta. Ha sido recientemente que se ha dotado al templo de un nuevo techo,
en este caso de madera y se ha restablecido el culto, si bien sólo se
celebraran los oficios en
días señalados.
Del castillo quedan en pie numerosos fragmentos de muros, que formaban parte,
tanto de las murallas como de las estancias.
La iglesia ha resistido mejor el paso de los años, gracias a las numerosas
reparaciones y modificaciones que ha sufrido. Es de planta circular, pero con
una cabecera formada por tres ábsides semicirculares, ligeramente ultrapasados.
Las dos absidiolas laterales han sido reconstruidas totalmente, conservándose
sólo original la unión con el resto del templo.
En la del lado sur se conservan dos arcos ciegos, que formaban parte del
friso con que estaba decorada. En la restauración se reprodujo este motivo en
los tres ábsides.
Junto al absidiola norte, encontramos excavada en el muro una hornacina
semicircular. Se cree que junto a la absidiola sur existía una hornacina
igual, pero este sector ha sufrido numerosas reformas y se construyó la
actual puerta de acceso. Para abrir esta puerta se modificó la
curvatura del templo.
El templo está iluminado gracias a una ventana de medio punto abocinada,
que podemos encontrar en cada uno de los ábsides y dos más en el sector sur.
Posteriormente se abrió un ojo de buey sobre la nueva puerta de acceso.
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