Las primeras noticias del lugar de Vilamirosa las encontramos en  el año 941, cuando Crispí y su mujer Auriola vendieron a Gaudamir, hijo de Sal.la, fundador de Sant Benet de Bages, un terreno situado en el condado de Osona, al término de Rueda en el término de Vilarmirosa y en el Castellet.

La iglesia, que desarrollaba funciones de parroquia, aparece documentada a partir del 1040, cuando Sunifred y su mujer Riquel dieron a Santa Maria de Ripoll un unos terrenos en la parroquia de Vilamirosa.

Hasta el siglo XVI la parroquia disfrutó de una cierta importancia, pero a partir de 1561 y debido al crecimiento de Manlleu, quedó reducida a sufragania dependiente de la parroquia  de Sant Esteve de Granollers de la Plana. Perdió esta condición en 1878, pasando a ser una simple capilla rural.

L’iglesia estaba formada por una sola nave, cubierta con una bóveda de cañón sin arcos fajones y rematada al este por un ábside semicircular.

Exteriormente está decorado con un friso de de arcuraciones lombardas, agrupadas de tres en tres y separadas por lesenas.

En el ábside se abren tres ventanas abocinadas, que iluminan el presbiterio.

En el muro sur encontramos dos ventanas más de la misma tipología.

La nave fue muy reformada a lo largo de los siglos. Una segunda nave, se añadió en época barroca por el lado norte. Las dos naves se comunican mediante un gran arco, que sustituye el primitivo muro románico.

También se añadió un campanario de torre adosado al muro norte, en el extremo noroeste. Tiene planta cuadrada y un solo nivel de ventanas en el último piso.

En el muro sur se añadió una sacristía, que ayuda a mantener en pie el templo, por que a raíz de un terremoto la nave se abrió hacia el exterior.

En el muro oeste se abre la puerta de acceso, que es posterior a la construcción de la nave. Está formada por dos arcos de medio punto en gradación.

El 1805 fue abierta una ventana en el coro y se rebozó toda la fachada. Un siglo más tarde, en 1917, se modificó el tejado y se encalaron los muros por la parte exterior y por  la interior. En el año 1982 fue restaurada por el servicio de Conservación de Monumentos de la Diputación de Barcelona, debido a que en 1936 había sido profanada.