Provincia de Barcelona
Castillo y iglesia de Sant Andreu
(Tona, Osona)
41º 51,247'N ; 2º 13,433'E
Encontramos documentado por primera vez el castillo y su iglesia en el año 889,
momento en que se consagró el templo. El año 1107, el conde de Barcelona, Ramon
Berenguer III, donó el castillo a su yerno, Bernat de Besalú, pero al morir
éste
sin descendencia el castillo volvió al casal de Barcelona. En los siglos XII y
XIII la familia de los Montcada fueron los señores de Tona, hasta que a
finales del siglo XIII nuevamente volvió a depender del conde de Barcelona. A
mitades del siglo XIV se crea el condado de Osona y Pere el Ceremoniós lo
cedió al vizconde Bernat III de Cabrera. Muy pronto el vizconde se arruinó y
el castillo volvió a la Corona. A principios del siglo XV, Martí l' Humà
concedió a los habitantes del castillo la condición de ciudadanos de
Barcelona. En 1446 el Condestable de Portugal ordenó su demolición, al haber
sido un fuerte bastión durante la guerra de los remença, pero los consejeros de Vic
se negaron.
Desgraciadamente nos han llegado muy pocos restos de este edificio. El más
notable es una torre de planta cuadrada situada en el ángulo noroeste y que tiene
una altura de unos siete metros.
Está datada entre los siglos X y XII, si bien hay algunas fuentes que apuntan que podría tener sus orígenes en la
época romana.
El templo original del siglo IX fue sustituido a principios del siglo XI por
uno de nuevo construido en románico lombardo. Está formado por una sola nave
rectangular cubierta con una bóveda de cañón ligeramente irregular y acabada
en un ábside semicircular.
El ábside está decorado externamente con arcuaciones ciegas y lesenas. En él se
abren tres ventanas de medio punto abocinadas.
La decoración lombarda se repite en los otros tres muros del templo. En los
muros norte y oeste los arcos están agrupados por parejas, mientras que en el
muro sur se encuentran distribuidos en grupos de dos y de tres. En este muro
encontramos dos ventanas similares a las del ábside, de medio punto y doble
derrame. En la parte central del muro oeste se abre una ventana en forma de
saetera.
La puerta de acceso la encontramos en el muro sur. Se trata de un arco de
medio punto hecho con grandes dovelas. En el mismo muro, más hacia poniente,
también hay una puerta de medio punto, más sencilla, y que era el antiguo
acceso al interior del templo.
En los siglos XVI y XVII se añadieron dos capillas laterales cerca del
presbiterio y la torre de campanario, de planta cuadrada, que se transforma en
octogonal en el último piso.
La dificultad de acceso al templo, hizo que en el siglo XVIII se abandonara el
culto, trasladándose a la iglesia de
Santa Maria de Barri, en un extremo del pueblo.
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