Castilla y León - Provincia de Palencia
Iglesia de San Lorenzo
(Zorita del Páramo, Páramo de Boedo)
42º 36,183'N ; 4º 21,580'O
Templo edificado a mediados del siglo XII, si bien ha sufrido algunas
modificaciones, que lo ocultan parcialmente.
Tiene una única nave, cubierta con una bóveda apuntada y dividida en cuatro
tramos gracias a tres arcos fajones.
Estos se apoyan en pilastras adosadas a los muros laterales, visibles también
desde el exterior.
Una vez dentro del templo, éste nos sorprende por su altura,
que acentúa la sensación de longitud de la nave
La iglesia tiene planta de cruz latina, con un transepto de poca profundidad.
Este está cubierto con una bóbeda apuntada perpendicular al eje de la nave.
El crucero se cubre con una cúpula semiesférica, que se transforma en un
robusto cimborrio por la parte exterior. Cuatro ventanas, ligeramente
apuntadas, iluminan su interior.
En el vértice inferior de las trompas se esculpieron los símbolos del Tetramorfos. Bajo la trompa del ángulo nordeste encontramos una imagen de la
Virgen con el Niño en el regazo, esculpida en piedra y posteriormente repintada.
Sorprende su ubicación, que junto con su bella factura hacen pensar que quizás
este no era su emplazamiento original.
También están esculpidos los capiteles de los arcos torales que forman el
crucero. Están básicamente esculpidos con motivos vegetales, a excepción de
los dos que comunican el crucero con la nave, que son historiados. En el
lado sur se esculpió un tema muy recurrente el románico como es el de
Daniel entre los leones
Por su parte, en el lado norte vemos a un caballero que lucha con un
dragón.
La cabecera está formada por un ábside semicircular, precedido de un amplio
presbiterio.
Este está decorado internamente con dos arcos ciegos polilobulados en cada
uno de los muros laterales, que están reseguidos por una moldura esculpida
con elementos vegetales.
Sus capiteles están decorados con motivos vegetales y animales.
El ábside está dividido por una imposta, tanto interna como externamente, que
se prolonga por el presbiterio.
En su parte central se abre una ventana de medio punto abocinada,
decorada con una arquivolta, que descansa en dos columnas y está protegida por
un sencillo guardapolvo. Sus capiteles, así como el arco interior, están
decorados con motivos vegetales.
Una ventana de similares características se abre en cada uno de los lados del
presbiterio.
Son de factura muy sencilla las ventanas abiertas en el transepto y en la
nave, a excepción de dos ventanas, que encontramos en los muros norte y sur
del templo. La del muro sur, situada a la izquierda de la puerta de acceso,
está decorada con una arquivolta y un guardapolvo esculpidos con motivos
vegetales.
La arquivolta se apoyaba en dos columnas, los fustes de las cuales se ha
perdido. Si que se conservan sus capiteles. En el de la izquierda podemos ver
a un centauro luchando con otro animal fantástico, mientras que en el del lado
derecho observamos dos aves entre motivos vegetales.
La ventana del muro sur está decorada por la parte interior. Una arquivolta
polilobulada está protegida por un guardapolvo ajedrezado. También es
ajedrezada la
imposta que recorre los muros laterales del templo por encima del nivel de
esta ventana.
Los capiteles, en los que se apoya la arquivolta, también están decorados. El
del lado derecho es historiado. Algunas fuentes creen que se trata de un
jinete montado en su caballo, mientras que otras fuentes afirman que se trata
de Sansón y el león, debido a la posición de las manos. El capitel del lado
derecho es de tipo vegetal.
La apertura de la ventana se ha modificado a lo largo de los siglos, si bien
se han conservado dos pequeñas cabezas humanas en el lado izquierdo. Se
desconoce a quien representan y cual es el motivo de esta ubicación.
El tejado de todo el templo se apoya en canecillos esculpidos con cabezas
humanas, de animales, músicos y también luchas entre caballeros y fieros animales.
En el interior del templo se conservan algunos fragmentos de pintura mural del
siglo XV, entre los que destacan dos grandes leones, que encontramos en el
arco toral que separa la nave del crucero. También se ha conservado en muy
buen estado el Pantocrátor rodeado por el Tetramorfos que hay en la bóveda
absidal.
En el muro sur se adosó un pórtico, que protege una puerta de acceso al templo.
No es el original, debido a que fue remodelada en estilo plateresco.
De esta época es el tímpano dónde está esculpida la escena del amortajamiento
de Cristo En la portalada se reaprovecharon algunas esculturas, que
representan a Cristo en Majestad y los doce apóstoles.
A los pies de la nave encontramos otra puerta, bajo una gran torre de factura
posterior.
Está formada por ocho arquivoltas apuntadas, dispuestas en gradación.
Sus capiteles están decorados con motivos vegetales y geométricos, que
tienen esculpidas una pareja de arpías y otro que la erosión no nos permite ver
de qué animales se trataba.
En el interior del templo se conserva una interesante pila bautismal. Está decorada con unas cenefas decoradas a base de motivos vegetales, que se
entrelazan y forman círculos.
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