Principado de Asturias
Iglesia de San Julián de los Prados
(Oviedo)
43º 22,063'N ; 5º 50,237'O
También conocida como Santullano. Construida entre los años 812 y 842. Fue
consagrada a los mártires San Julián y Basilisa. No se trataba de una
iglesia aislada, si no que formaba parte de un palacio construido por Alfonso
II como residencia de descanso.
En tratarse de una iglesia palatina, fue construida con planta basilical de
tres naves, con cubierta de madera, un amplio crucero y una cabecera formada
por tres capillas cubiertas con bóveda de cañón.
Las naves están separadas
por arcos de medio punto apoyados en pilares rectangulares.
Un gran arco toral
separa la nave central del crucero.
Destaca el crucero por sus dimensiones, ya que es más alto que el resto
de dependencias del templo. A ambos lados encontramos dos habitaciones, que
corresponden a las sacristías. La del lado norte tenía dos plantas, la
superior era la tribuna regía.
En el transepto se abren tres capillas a través de arcos de medio punto. La
principal tiene arcos de medio punto en cada uno de sus muros.
En esta
capilla también encontramos una imagen de Cristo Crucificado del siglo XII, de
grandes dimensiones.
Sobre la capilla principal se encuentra la cámara secreta, que está
iluminada por una ventana de tres arcos que da al exterior.
A parte de ser el templo prerrománico más grande, San Julián de Prados
destaca por su rica decoración pictórica. Las pinturas fueron descubiertas
durante las obras de restauración de principios de los siglo XX, cuando se
retiró la capa de cal que las ocultaba. Los motivos predominantes son
geométricos, flores, circunferencias, motivos de tradición romana cómo pueden
ser palacios con sus cortinas.
También puede verse representada una cruz de pedrería con las letras alfa y
omega a cada lado.
Gracias a la técnica que se usó en su día, se ha podido reproducir la
parte de los dibujos que se han perdido por el paso del tiempo. Esta técnica
consistía en marcar con un punzón el contorno de las figuras sobre la pared
y posteriormente se pintaba al fresco.
Por motivos de conservación de las pinturas no se permite hacer ningún tipo de
fotografía en el interior, pese a que si se hicieran sin flash no producirían
ningún perjuicio a los frescos. En hacerse las visitas acompañadas de un guía
y en grupos reducidos, no entiendo por que no dejan hacer fotos sin flash, ya
que los visitantes están totalmente controlados. Cuesta de entender y más
tratándose de un monumento Patrimonio de la Humanidad. Las imágenes que podéis
ver fueron realizadas por van der Eecken D. y cedidas a ArtMedieval.net y nos
permiten hacernos una idea de como es el interior del monumento.
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